Como adaptar y mitigar los efectos del cambio climático en la agricultura?

El año 2023 ha sido declarado a principios de enero de 2024 por la Organización Meteorológica Mundial y otros organismos internacionales que monitorean el clima, como el año más cálido en los registros climáticos de 174 años que datan de 1850. La temperatura media a nivel global ha aumentado 1.45 °C desde entonces. El año 2023 fue 0.60 °C más cálido que el promedio de 1991-2020 y 1.45 °C más cálido que el nivel preindustrial de 1850-1900. Los últimos 9 años de 2015 a 2023 han sido los más cálidos registrados hasta ahora. Con el valor de 1.45 °C nos estamos acercando al Acuerdo de París de no sobrepasar 1.5 °C. Esto tiene importancia no solamente en el aumento de la temperatura, sino también su efecto en los eventos climáticos extremos, en el ciclo del agua y en los impactos sobre el desarrollo sostenible, incluida la agricultura. El propósito de este artículo es hacer mención nuevamente de las causas y estado actual del calentamiento global, el impacto en la agricultura, y de medidas de adaptación y de mitigación para reducir el calentamiento global y su impacto en el clima y en la agricultura.

Las causas e impactos del aumento de la temperatura

El origen del aumento de la temperatura es el continuo incremento de gases con efecto de invernadero. Las emisiones de gases con efecto de invernadero son el Bióxido de Carbono (CO2), el Metano  (CH4) y los Óxidos de Nitrógeno  (NO y NO2) los cuales establecieron récords en 2022 y continúan en aumento, no obstante los acuerdos tomados a nivel internacional.  

 El aumento de la temperatura en 2023 se debió en principio al calentamiento global general por la emisión de gases de invernadero, pero también se combinó con la presencia de El Niño a mediados del año, el cual apareció después de 3 años de La Niña. La presencia de El Niño fue una de las causas principales del aumento de la temperatura en 2023, pero no la única. 

Los impactos de este año 2023 récord en temperatura, fueron un gran número de eventos extremos que se registraron alrededor del planeta, incluyendo ondas de calor, inundaciones, sequías e incendios forestales. En el caso de México se registró una onda de calor en el mes de junio que afectó fuertemente todos los sectores, incluida la agricultura; el ciclón Otis que afectó la población de Acapulco, la sequía que impactó la agricultura de varios estados de la república, principalmente del norte del país (ver mas detalles sobre esto en el artículo de Agroclima de TF de Dic.-Ene 2023-24). La escasez de lluvias en 2023 también afectó el llenado de presas en muchas regiones del país y como consecuencia, redujo la superficie de siembra de cultivos agrícolas en estados como Sinaloa y Sonora.  

 ¿Qué es el cambio climático?

 El cambio climático tiene su origen en la mayor emisión de gases de efecto de invernadero desde los inicios de la época industrial. Esta situación se ha venido acentuando más a partir de la década de 1970.  Los gases de invernadero que provocan calentamiento global son principalmente el CO2, el metano y los óxidos de nitrógeno. El calentamiento global tiene efectos desde luego en el incremento de la temperatura. A partir de aproximadamente 1990 se observa una tendencia al aumento de la temperatura en prácticamente todos los puntos de la Tierra, la cual varía dependiendo de las condiciones locales como cubierta vegetal, cuerpos de agua cercanos y otros.  El calentamiento global también ha cambiado los patrones tradicionales del clima y los periodos y cantidades de lluvia. Además de estos cambios paulatinos que se van presentando poco a poco, el cambio climático se manifiesta de manera más directa mediante eventos climáticos extremos como sequías, inundaciones, incendios forestales, ondas de calor y otros, los cuales cada vez son más frecuentes e intensos.  Todo esto, desde luego tiene un impacto directo en la agricultura y presenta nuevos retos en la producción agroalimentaria con un desarrollo sostenible.

¿Qué se puede hacer?

 La agricultura puede tener un doble rol: 1) implementar medidas y prácticas de adaptación para una agricultura sostenible y rentable a largo plazo, y 2) medidas de mitigación  y prácticas que contribuyan a reducir el calentamiento global. Cada grupo se describe a continuación.

 Medidas y prácticas de adaptación de la agricultura al cambio climático

 Las medidas y prácticas de adaptación al cambio climático involucran no solamente al productor agrícola, sino también a las empresas privadas e instituciones oficiales. El sector de financiamiento para la agricultura debe también participar en su implementación.

 1)     Una primera medida es evaluar el riesgo climático y tendencias del clima en las regiones agrícolas. Es necesario conocer con más precisión la magnitud y recurrencia de la sequía, las ondas de calor, la falta de horas frío para cultivos frutales y trigo de invierno, la disponibilidad de agua para riego y otras. Con esta información de base, y los pronósticos del clima estacionales, seleccionar los cultivos y variedades más apropiados, las fechas de siembra y, el manejo del agua, de huertos frutícolas, del ganado, etc.

 2)     Desarrollo y utilización (si están disponibles) de variedades de cultivo tolerantes a estrés hídrico y estrés térmico y ciclos de cultivo más cortos, cuando los pronósticos climáticos indiquen condiciones adversas de baja precipitación, inicio tardío del temporal, o altas temperaturas. Esta práctica es particularmente importante para cultivos básicos agroalimentarios.

3)     En los cultivos frutales que requieren un periodo de descanso fresco con acumulación de frío para una floración regular, según la especie, será necesario desarrollar variedades que se adapten a las nuevas condiciones climáticas de menos disponibilidad de horas frío.

 4)     Mejoramiento de la fertilidad física, química y biológica del suelo. La fertilidad física, incluye la conservación del suelo con buena estructura, sin erosión y con una labranza mínima para almacenar y conservar más humedad.  La adición de materia orgánica al suelo es otra práctica urgente, considerando que la mayoría de los suelos de México tiene niveles por debajo de 1%. La materia orgánica, mejora la microbiología del suelo, la estructura, la retención de humedad y aporta micronutrientes.

 5)     Uso eficiente del agua de riego. La alta variabilidad del clima sobre todo la precipitación ha hecho evidente la frecuente escasez de agua para riego agrícola en muchas regiones. En México se ha desarrollado tecnología para el uso eficiente del agua mediante el monitoreo del clima, la humedad del suelo y el desarrollo de los cultivos. Hace falta, sin embargo, que esta tecnología se ponga a disposición de los Distritos de Riego y se empiece a utilizar de manera progresiva. El uso eficiente del agua también debe llevarse a cabo en los predios privados que utilizan agua subterránea.

 Medidas y prácticas de mitigación en la agricultura para reducir el calentamiento global

 El sector agrícola contribuye con aproximadamente 1/3 de la emisión total de gases de efecto de invernadero, principalmente mediante el uso de fertilizantes nitrogenados, la ganadería y el cultivo de arroz por el método de inundación. Aunque los 2/3 restantes son por emisiones principalmente de CO2 por la industria, el transporte y otros sectores, el sector agrícola puede contribuir de manera significativa tanto en la reducción de óxidos de nitrógeno y emisiones de metano, como en la captura de CO2, ambas acciones contribuyen a la reducción del calentamiento global y a atenuar el cambio climático. Acciones propuestas:

1)     Reducir la deforestación y por el contrario, impulsar el establecimiento de más bosques, los cuales no solo ayudarán a capturar más CO2 sino también a mejorar el ciclo del agua.

 2)     Utilizar los análisis de suelo y aplicar solamente las cantidades necesarias de fertilizantes nitrogenados y otros que se requieran, y mejorar los métodos de aplicación incorporando el fertilizante en suelos con humedad para reducir al mínimo las pérdidas de nitrógeno en forma de gas (óxidos de nitrógeno).

 Mayor información sobre este tema y otros relacionados con el uso de la información climática en la agricultura, lo encuentra en www.climaproagro.com

 

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